jueves, 20 de septiembre de 2012

1. La Formación Geológica del Relieve Peninsula

1.1. Era Primaria o Paleozoica

En un principio, la Península Ibérica no existía, todo lo que ahora se conoce como tal estaba ocupado por el mar. Las primeras tierras que se subieron a la superficie formaban el antiquísimo macizo granítico gallego (Montes de León, montes de Toledo...). Con el paso del tiempo, en el mar se fueron depositando arcillas y areniscas que formaron estratos.


Hace aproximadamente 250 millones de años, durante la Era Primaria los estratos antes nombrados comienzan a sufrir presiones y temperaturas elevadas debido al movimiento de la corteza terrestre o por el movimiento herciniano, de esta forma se fueron plegando poco a poco. Durante este periodo los materiales que formaban los estratos se convierten en rocas metamórficas (cuarcita, pizarra...) , en estas rocas abunda el silíce, por lo que también se denominan rocas silícicas.

Durante este periodo también se formaron sistemas montañosos. Muchos de estos relieves fueron erosionados, formando zócalos de materiales rígidos y resistentes. La intensa erosión hizo que muchos de estos zócalos se quedaran cubiertos por el agua y otras partes quedaros reducidas en relieves horizontales. Al Oeste se eleva el Macizo Hespérico, convertido en meseta o zócalo.

1.2 Era Secundaria o Mesozoica 

Los materiales formados en la Era Primaria fueron erosionados y transportados por el agua y por el viento. Muchos de estos estratos, llamados sedimentos, quedaron superpuestos en los fondos marinos cercanos al zócalo. Estos sedimentos o estratos estaban formados por materiales gruesos(conglomerados) y finos(areniscas. arcillas...).

A estos depósitos se le añaden restos de animales marinos. Sometidos a grandes presiones y temperaturas por el eso de diferentes estratos, forman las rocas calizas. 
Las corrientes marinas pueden arrastrar la arcilla al mar hasta que esta absorba líquido, donde se forman estratos.

1.3 Era Cenozoica

En esta era se dividen dos periodos:

1.3.1 Período Terciario: orogénesis alpina

En este periodo, tal vez por un meteorito, se produjo una inestabilidad de las placas tectónicas. Las abundantes colisiones y roturas crearon movimientos orogénicos:
- El movimiento alpino no pudo plegar los materiales antiguos por lo que los zócalos se fracturaron y dislocaron: unos quedaron levantados, otros se deslizaron y algunos se hundieron, por lo que se dice que partes de los relieves antiguos hercinianos formaron mesetas elevadas, cordilleras y depresiones.
El antiguo zócalo que ocupaba parte de la actual Península se fracturó en dos bloques: la Meseta Norte y la Meseta Sur. En la zona de fractura se formaron fallas de diferentes tipos. Resultado de los movimientos del zócalo son las cordilleras que cruzan la Meseta: el Sistema Central y los Montes de Toledo.
Otros tipos de origen tienen: Macizo Galaico-Leonés, la parte occidental de la Cordillera Cantábrica y Sierra Morena.
- La colisión de placas también plegó varios depósitos de materiales. Así se formaron así los relieves exteriores de la Meseta: Pirineos, Cordilleras Béticas y Cordilleras Costero-Catalanas.

1.3.2 Período Cuaternario: glaciarismo

Este Periodo comenzó hace aproximadamente 1,8 millones de años, se caracteriza por:

- La erosión de los relieves alpinos, debido a la acción de los ríos y de los glaciares, estos fueron rellenando las fosas que había entre los relieves que rodeaban la Meseta y los relieves exteriores. La depresión del Ebro, se formó entre el Pirineo y el Sistema Ibérico, y la depresión del Guadalquivir se forma entre Sierra Morena y las Cordilleras Béticas.

- La sedimentación y colmatación de las zonas bajas. La erosión de los relieves alpinos hizo que los materiales fueran rellenando depresiones más modestas situadas entre montañas. Estos aportes formaron llanuras litorales en lugares de aguas poco profundas. Estos procesos siguen en la actualidad y son visibles. En el delta del Ebro y en las zonas costeras de la depresión del Guadalquivir se puede apreciar.

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